Líderes de alabanza. Dejen de tratar de ser “cool”

Me pregunto … si Jesús fuera a evaluar nuestra adoración, ¿la evaluaría como cool?

En diferentes países de habla hispana la palabra cool podría traducirse como: Genial, padre, chido (México), guay (España), bacano (Colombia), chevere (venezuela).

Si el Hijo de Dios entrara en nuestros servicios el domingo por la mañana, ¿Podríamos impresionarlo siendo lo suficientemente cool?

Es hora de que líderes de alabanza y adoración se preocupen por las personas y obviamente por buscar profundamente la presencia de Dios. Nuestras iglesias necesitan líderes que conozcan a las personas a las que sirven y conozcan al Dios que adoran.

Si eres fan de la ropa de moda, no hay problema. Pero recuerda, esa no es tu fortaleza como líder de alabanza y adoración.

Si tienes una voz increíble, es un gran regalo. Pero recuerda, no es tu fortaleza como líder de alabanza y adoración.

Si eres un compositor experto, eso es maravilloso. Pero una vez más, recuerda que esa no es tu fortaleza como líder de alabanza y adoración.

Si tienes una tonelada de energía en el escenario, eso te servirá bien. Pero no es tu fortaleza como líder de alabanza y adoración.

¿Qué te diferencia? ¿Qué te hace un gran líder? Tu hambre constante por la presencia de Dios y una profunda compasión por las personas. Punto.

No importa si tienes 65 años y usas pantalones holgados. Tienes un lugar si tienes hambre constante de Dios y compasión por las personas.

No importa si eres joven e inexperto. Hambre para Dios y Compasión por las personas es lo que se necesita.

Ser cool no es un valor. A veces, nuestro impulso a ser relevantes nos ha deja solo como una alternativa cristiana a lo que el mundo ofrece. Busquemos la trascendencia. Recuperemos el misterio del Cielo en la tierra.

Para ser honestos, el problema es cuando pensamos que somos algo. Cuando el orgullo que tenemos nos impresiona hasta nosotros mismos y nos empuja a vivir más preocupados por lo que la gente piensa de nosotros que por el ministerio que estamos haciendo.

Banning Liebscher, pastor de Jesus Culture, comentó recientemente en un podcast: algunos de nosotros nos apasiona más seguir un sueño que  seguir a Jesús. Somos más impulsados ​​por nuestra reputación que por buscar agradar a Dios.

Cambiemos todo esto. Se un servidor:

– Real

– Bíblico

– Compasivo

– Comprometido

– Adorador

– Sin nombre

– Con corazón quebrantado

– Sencillo

– Cristo centrico

– Santo

– Educable

– Activo

– Flexible

– Humilde

– Apasionado

Ser de esta manera puede resultar en que no te conviertas en alguien muy conocido o famoso, pero seguramente servirá para hacer que la belleza de Cristo sea más visible.

¿A quién le agradas?
Todo se reduce a a quién pretendes agradar. Escucha lo que Pablo dice en Gálatas:

“Pues, ¿busco ahora el favor de los hombres, o el de Dios? ¿O trato de agradar a los hombres? Pues si todavía agradara a los hombres, no sería siervo de Cristo. ”
 Gálatas 1:10.

Pablo es muy claro al decir que si su objetivo fuese complacer a las personas, literalmente no podría ser un siervo de Cristo. Wow.

Déjame preguntarte: ¿a quién estás tratando de impresionar? ¿De quien buscas el favor?

Estimado líder de alabanza y adoración, ¿quieres entretener a la gente en los servicios o guiarlos a la Fuente que nunca se secará? ¿Quieres levantar adoradores que dependan de tu carisma y talento o de un pueblo que pueda adorar en medio de las tormentas?

¿Quieres ser conocido o hacer conocer al Dios Eterno y Glorioso a la mayor cantidad de gente posible?

¿Estás fomentando una iglesia local de admiradores tuyos o de verdaderos adoradores de Dios?

Sé que estas preguntas pueden ser duras. Pero vale la pena ponerlas sobre la mesa.

¿Qué piensas? ¿Estamos tratando ser demasiado cool en lugar de ser como Cristo? ¿Cuál es tu experiencia?

Originalmente publicado aquí