La palabra hábito se define como el modo particular de realizar acciones por repetición originado por tendencias instintivas, traducido a lenguaje común podemos redefinirlo como las practicas constantes en nuestra vida diaria que vamos forjando hasta realizarlas de manera natural.
A muchos nos ha sucedido que queremos generar cambios en nuestra manera de vivir de manera espontánea, y es precisamente cuando los hábitos no funcionan, principalmente porque cuesta generar un cambio en nuestra rutina, pero también porque nuestro cerebro va aceptando dichos hábitos de manera gradual, no asimila los cambios de golpe, al momento de crear un nuevo parámetro en nuestra vida cotidiana debemos hacerlo durante un periodo mínimo de 21 días para que nuestro cerebro lo pase a nuestra parte consiente, la convierta en aprendizaje y finalmente se almacene como un hábito.
Algo muy importante es que no debemos precipitarnos a intentar crear muchos hábitos al mismo tiempo, todo es un paso a la vez, si creas de manera eficiente 1 habito, podrás crear muchos más a un corto plazo.

Hay hábitos que se crean de manera fácil, porque van intrincados a nuestra vida, tales como:
-Dedica tiempo a la lectura
-Tener un horario para dormir
-Comer saludable
-Meditar
Sin embargo hay hábitos realmente buenos que cuestan más hacer, pero dichos hábitos son los que realmente cambiarían nuestra manera de vivir, un ejemplo son:
-Ser absolutamente sincero
-Levantarse extremadamente temprano
-Ser generoso/hacer algún tipo de voluntariado
-Dedicar tiempo para meditar
-Hacer algo creativo
-Dejar el teléfono en el bolsillo
Entre muchos otros hábitos más, si empiezas a practicarlos tendrás muchos beneficios, ya que ayudan a reducir la ansiedad e incluso la depresión, aumentan la eficiencia, permiten tener una mayor capacidad de organización y fomenta la autonomía, solamente tu decides en qué momento quieres iniciar con una vida de hábitos.