3 errores que todo líder de alabanza debería evitar

Si eres líder de alabanza, te tengo algunas preguntas:
¿Las personas se conectan con Dios en las reuniones que diriges, o simplemente están aplaudiendo?

Es bueno reflexionar sobre este tipo de preguntas al evaluar el tiempo de adoración de tu iglesia. ¿Por qué? Porque si tienes un equipo bien preparado para tu reunión y muchas caras nuevas, el analizar tu tiempo de adoración te permite ver los puntos ciegos que de otro modo podrías perderte. Lo creas o no, muchos líderes de alabanza pueden obstaculizar sus servicios al cometer algunos errores que generalmente son fáciles de corregir.

Estos errores pueden no ser obvios errores. De hecho, a menudo ocurren lentamente con el tiempo. Pero, si no se les da la atención adecuada, impedirán el crecimiento de tu iglesia y harán que sea más difícil para tu congregación participar en el servicio.

Aquí hay tres de los errores más comunes.

Error 1: No tener comunicación con tu pastor.

Tu manejas la música y él / ella maneja la predicación, ¿verdad?

No necesariamente.

Conectarte con tu pastor es crucial, ya que ayuda a derribar muros y a moverse con unidad hacia una visión de Dios correcta para tu iglesia.

Error 2: Nunca interactúas con la congregación fuera del escenario.

Esto no significa que tengas que ser el mejor amigo de todos en tu iglesia.

Pero, como líderes de alabanza y adoración, mientras más conozcamos sobre las personas en nuestros servicios y podamos sentir empatía con sus luchas y necesidades, mejor podremos guiarlos durante el tiempo de adoración.

Error 3: No estás pendiente del tiempo entre canción y canción

Esto es lo que queremos decir con eso.

A veces es fácil simplemente pararse e ir de una canción a otra. Pero, a medida que tu y tu equipo se preparan, trata de identificar la necesidad, tal vez sea momento poderoso para las personas si se leyera un versículo de la biblia o se cantara el coro de la siguiente canción.

Ser consciente de estos momentos brinda a las personas la oportunidad de adentrarse en la adoración más profundamente.

¿Que otros consejos le darías a tus colegas directores de alabanza?