Pertenecer a un grupo de alabanza dentro de nuestra iglesia o ministerio es un gran privilegio, una oportunidad que Dios nos ha dado. A lo largo de mi carrera como ministro y músico de alabanza he podido conocer diferentes músicos y cantantes que sirven a Dios por medio de sus dones y talentos, y así mismo he podido conocer diferentes culturas de grupos de alabanza.
La cultura es aquello que eres en lo más profundo de tu ser, y también es el ADN del grupo. Son aquellas costumbres y formas de trabajo, las cuales definen el carácter y desarrollo del equipo; sin embargo, siempre existen limitantes, y hasta actitudes y hábitos negativos de ciertos músicos dentro del grupo que impiden que sean más eficientes al momento de ministrar la alabanza en su iglesia o ministerio, lo cual llega también a afectar a otros. Un ejemplo de estos son la impuntualidad, la falta de preparación, el descuido de la vida espiritual, el ego, etc.
Todos en algún momento hemos pasado por alguna de estas cosas, ninguno de nosotros es perfecto y somos débiles en diferentes áreas de nuestra vida, pero Dios nos dice en su libro:
“…mi poder se perfecciona en la debilidad…”
2 Corintios 12:9
Esta palabra no debe de ser una excusa para fallar, sino que debe ser un impulso para poder identificar en lo que fallamos, y poder corregirlo para así poder ser más eficientes al momento de ministrar la alabanza y la adoración.
Ahora bien, adentrémonos a analizar estos 5 Consejos para ser un Músico Eficiente en el Grupo de Alabanza.
1.- Sé Puntual.
La puntualidad es algo muy importante, habla de compromiso y entrega hacia tu ministerio.
Debes aprender a administrar tu tiempo, ya sea si debes llegar a un ensayo o a una reunión donde vas a ministrar. Todos tenemos actividades en la semana; escuela, trabajo, compromisos familiares, etc. Sin embargo; tú estás sirviendo a Dios por algo que Él vio en ti, no por tu talento ni por tu don, así que sé comprometido con tu ministerio y has todo lo posible por ser puntual en cada actividad que realices como músico de alabanza.
Esto te ayudará a conectarte a tiempo, afinar tu instrumento, ecualizar, dar un último repaso a las canciones que previamente ensayaste, y de esta manera podrás ser eficiente y darás lo mejor de ti.
2.- Estudia las Canciones.
El hecho de estudiar las canciones que vas a ministrar en una reunión para mi es sumamente importante.
En ocasiones he podido observar que a veces es complicado para algunos grupos de Alabanza tener tiempos de ensayo como equipo, ya sea por falta de tiempo, falta de organización, o algunas otras situaciones.
Yo soy de los que piensan que el tiempo de ensayo como equipo es fundamental, pero en caso de que por cualquier situación no se logre hacer un ensayo en equipo, enfócate a estudiar al 100% las canciones que van a ministrar. De este modo llegarás seguro a la reunión, y podrás realizar un correcto desempeño en el tiempo de alabanza.
Si en tu equipo de Alabanza tienen ya un tiempo definido de ensayo, ¡Excelente!, aplica el mismo consejo.
Estudia correctamente las canciones que van a ensayar y de este modo podrán consolidarse mejor como equipo, y lograrán que Dios se agrade de la adoración que levanten en su altar.
3.- Sé Humilde.
Otro punto importante es la humildad. Ser humilde significa ser una persona que sabe adaptarse a cualquier instrucción o situación que implique hacernos salir de nuestra zona de confort.
Aquellas veces que te piden hacer más allá de lo que te corresponde, como lo puede ser jalar un cable, cargar una bocina. Muchos piensan que solamente les corresponde tocar y ya, que no les pidan hacer más.
Amig@, nosotros no somos estrellas. Somos ministros, adoradores y ejemplos, comencemos a actuar como tal.
Aprende a ser humilde, y deja que Dios trabaje con tu corazón, ten siempre una buena actitud, deja atrás todo el orgullo y el ego.
Es momento de que comencemos a ser quienes Dios espera que seamos, adoradores en espíritu y en verdad.
La humildad no es señal de debilidad, es señal de un corazón conforme al de Jesús, aquél que se humilló para que nosotros fuéramos rescatados.
4.- Sé Obediente.
En los años que llevo como ministro y músico de alabanza me he dado cuenta de una verdad impresionante; la obediencia trae bendición.
Cuando obedecemos a nuestras autoridades, líderes y pastores la bendición de Dios cae a nuestras vidas y el comienza a levantarnos de una forma que no imaginamos.
Él quiere llevarnos a grandes cosas, quiere que nuestros sueños se cumplan y que nuestro propósito se cumpla; pero para lograrlo debemos aprender a ser obedientes.
La obediencia principal es hacia nuestros padres, posteriormente hacia nuestros pastores y líderes.
Sin obediencia, no hay bendición.
5.- Ten Intimidad con Dios.
Este punto, considero que es el más importante de todos.
Nuestra relación en lo íntimo con Dios es aquello que nos va a dar la capacidad de establecer su presencia en cualquier lugar que nos paremos.
Mira lo que está escrito en su palabra:
‘Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público. ‘
S. Mateo 6:6
Cada vez que adores en la intimidad, Dios te recompensará en público. La recompensa es que cada vez que agarres un instrumento, cada vez que abras tu boca para adorarle, Él visitará ese lugar y establecerá su presencia; el cielo dominará la Tierra cada vez que tu le adores, pero para esto es importante conocer su corazón.
No se trata de tocar por tocar, o cantar por cantar, debes entender que lo que haces tiene un alto peso de Gloria, y si descuidas tu relación con Dios, solamente serás un músico más…
Hemos sido llamados a trascender, pero no por nuestras obras, sino por la gracia de Dios.
Ser un músico de alabanza conlleva una gran responsabilidad, siempre y cuando conozcas el verdadero propósito de serlo.
Somos adoradores, personas escogidas para establecer el cielo en la tierra, para que la Gloria de Dios se manifieste en medio de la congregación, y para llevar a la iglesia a la Presencia del Creador.
Espero que estos consejos te ayuden a mejorar en este servicio de honra, y que puedas llegar a ser un músico eficiente en este ministerio.
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