En la vida real el sonido procede de fuentes infinitas alrededor de nosotros por lo que en el sentido estricto el número de canales requerido por el oído humano es infinito, algo que en el mundo de la electrónica podría denominarse un sistema perifonico, lo que implica producir un sonido en todas direcciones, en 360°.
Hoy en dia solo hay dos maneras de lograr un sistema perifonico ideal, en la vida real o en una burbuja sellada. En cuanto a tecnología la más cercana a lograrlo es el sistema no comercial llamado Ambisonics, el cual requiere un mínimo de cuatro altavoces isotropicos para representar a Norte, Sur, Este y Oeste, donde los sonidos llegan de todas las direcciones y son tratados igualmente, en oposición a la mayoría de otros sistemas de sonido envolvente que asumen que las principales fuentes de sonido son las frontales y traseras.
Actualmente nosotros contamos con la tecnología del sonido monoaural (o en disposición 1.0, abreviado frecuentemente como mono), sonido que sólo está definido por un canal y que origina un sonido semejante al escuchado con un solo oído. El sonido monoaural carece de la sensación espacial.
Por otro lado el sonido estéreo es reproducido en dos canales (disposición 2.0), un ejemplo serían los CD de audio, las estaciones de radio FM y algunos canales de TV. El propósito de grabar en sonido estereofónico es de recrear una experiencia más natural al escuchar, donde al menos en parte se reproduce el lugar de donde proviene cada fuente de sonido grabada.
El sonido surround (5.1) es el sistema más habitual de cines en casa, el 5.1 hace referencia a la forma en que es distribuido el sonido. En este caso, 5 altavoces que tratan de forma independiente un rango determinado de frecuencias dividiéndose en segmentos diferentes: altavoces frontales, traseros, laterales y un subwoofer que corresponde al .1 y que está diseñado para funcionar en frecuencias de 20 a 200 Hz. La hipótesis principal en este sistema es que los altavoces frontales son los más importantes, y esta distinción se basa en la colocación tradicional de altavoces en un escenario, el teatro, el cine o la televisión.
El siguiente paso es de 7,1, y el punto de referencia actual es de 10,2 y su variante 12,2. Aunque sólo el 7,1 y 5,1 están estandarizados, por lo que todo lo anterior no tienen representación suficiente en el mercado, ya sea con medios de comunicación o sistemas.
El principal problema con cualquier sistema de sonido envolvente por encima de 7,1 es el desafío de aparejo en un espacio real. Cada habitación o sala es diferente, y es difícil encontrar los lugares adecuados para 8 altavoces, por no hablar de 12 o 14.
El segundo gran problema es la enorme tarea de mezclar todos estos canales. Aquí la NHK Science & Technology Research Laboratories de Japón lograron una solución acercándose a un sonido perifonico ideal con un sistema 22.2 de sonido envolvente, algo que actualmente es casi imposible de recrear en nuestra sala, además de que la utilidad práctica de tal herramienta es cuestionable.
En conclusión el número de canales que necesita nuestro oído es infinito y solo podemos obtenerlos en la vida real o en una burbuja, pero las tecnologías que más se acercan a ello es el Ambisonics y el sonido envolvente de 22.2, algo que en un futuro podríamos llegar a ver. Pero en cuanto a lo que disponemos hoy en día tal vez lo más conveniente sería el sistema 5.1, por la única y simple razón de que actualmente las películas que son la principal causa para comprar estos sistemas se graban en esos canales.
Referencia: NHK