Amigos, una vez más tengo el honor de escribir para ustedes un artículo que será de gran utilidad como lo fue para mi, espero que lo disfrutes y que te funcione para poder seguir creciendo en el ministerio al que fuiste llamado; así que te doy unos segundos para que vayas por una botana y puedas leer esto… ¿Listo? ¡Venga! Comencemos…
Más de una vez he escuchado diferentes opiniones acerca del uso de las secuencias en la alabanza, para unos es una gran herramienta, para otros parece ser una pesadilla, y para otros simplemente no son de utilidad.
Antes de continuar déjame explicarte lo que es una secuencia por si no la conoces:
Muchas veces confundimos las secuencias con las pistas de acompañamiento pero aunque no lo creas son muy diferentes ya que una pista de acompañamiento contiene todos los instrumentos ya grabados y predeterminados, de este modo tú cantas o tocas encima de esa instrumentación sin la opción de hacer modificaciones. La diferencia que tiene la secuencia es que en ésta tenemos todos los instrumentos canal por canal lo que nos facilita la elección solamente de los canales que vamos a necesitar, por ejemplo, puedes complementar las canciones de la alabanza con sonidos que no puedes hacer en vivo, como lo son muchas veces sintetizadores, trompetas, pads, etc. Por otro lado funciona para llenar un espacio vacío, es decir, si tu grupo de alabanza no cuenta con un guitarrista por ejemplo, activas la guitarra en la secuencia junto con los demás canales que desees utilizar y así puedes complementar las canciones que llevan guitarra eléctrica sin necesidad de que alguien la esté tocando (lo sé, es fantástico…)
Como puedes ver, una secuencia es una maravilla (a mi parecer), ya que te lleva a crear un sonido con mayor grado de excelencia al momento de dirigir la alabanza en tu iglesia, dándole también un toque de profesionalismo y calidad.
Pero, hay una opinión que he escuchado en más de una persona con respecto a las secuencias en el tiempo de alabanza y adoración en la iglesia, y es el tema del que quiero hablarte hoy, y no te preocupes, te lo voy a explicar con puntos y claves importantes que están escritos en el libro más famoso de toda la historia, seguro lo conoces mejor como La Biblia.
A lo largo de mi experiencia como director y líder de alabanza he escuchado a muchos pastores y líderes de alabanza que piensan que el uso de secuencias ‘interrumpe’ o ‘impide’ el fluir en la alabanza, que primero está la presencia de Dios antes que las cosas técnicas, que se debe dar lo que se pueda dar musicalmente hablando, que lo importante es adorar con todo el corazón. A estas opiniones yo digo Si pero a la vez No… ¡Espera! antes de que te espantes y cierres mi artículo te voy a explicar por qué…
Dios nos dio algo llamado creatividad a cada uno de nosotros, esto lo dije en uno de mis artículos anteriores; nos la dio justamente para que busquemos distintas formas de adorarle, dando lo mejor de nosotros y exaltando su nombre en todo momento, una forma excelente de ver esto es entendiendo que todas las cosas que hacemos, debemos hacerlas siempre como para Él
‘Y todo lo que hagan, háganlo de corazón, siempre para el Señor y nunca para los hombres; ‘
Colosenses 3:23
Habiendo citado al Apóstol Pablo en su carta a los Colosenses, podemos entender que cada cosa que hacemos siempre nos sirve para adorar a Dios, por lo mismo al momento de adorar por medio de la música cada cosa que implementemos, aunque parezca extraño para otros, está enfocado en Dios, si no de nada sirve.
Ahora volviendo al tema de las secuencias, a continuación mencionaré 3 tips/recomendaciones para usar las secuencias sin que interrumpan el fluir de la alabanza y la adoración:
1.- No dependas de ellas.
Uno de los errores más comunes que llegan a suceder al momento de usar secuencias, es el abuso de las mismas. Es decir, cuando no puedes dirigir la alabanza si no tienes una secuencia, si te está sucediendo esto es señal de que estás dependiendo más de la secuencia que del mover de Dios en la alabanza. Recuerda que la secuencia sólo es una herramienta, para dar mayor calidad a las canciones pero no dependas de ellas, enfócate en depender únicamente de la presencia de Dios, y verás un excelente resultado.
2.- Usalas con inteligencia.
El uso inteligente de las secuencias será de aquel que las maneja. Si tú eres líder de alabanza, tu deber es guiar al grupo de alabanza a que juntos lleven a la iglesia a la presencia de Dios, y las secuencias van a aportar mucho si las usas correctamente, tomando en cuenta el primer punto. Que este gran recurso sirva como impulso y no como distracción.
3.- Nunca pierdas tu esencia de adorador.
En algunas ocasiones me ha tocado ver como ciertos músicos o líderes de alabanza llegan a sentirse artistas cuando utilizan secuencias, esto es porque hace que su sonido sea de gran calidad, pero esto no quiere decir que te debes sentir la gran cosa, hay un consejo que claramente dice lo siguiente:
‘Basado en el privilegio y la autoridad que Dios me ha dado, le advierto a cada uno de ustedes lo siguiente: ninguno se crea mejor de lo que realmente es. Sean realistas al evaluarse a ustedes mismos, háganlo según la medida de fe que Dios les haya dado. ‘
Romanos 12:3
En otras palabras mi amigo, no te sientas mucho.
Recuerda siempre que somos barro en las manos del alfarero, estamos en continua renovación y aprendizaje. Por eso el consejo es, no te sientas mucho por sonar bien, más bien enfócate en que con una mayor calidad en la alabanza, la gente se conecte con mayor facilidad al corazón de Dios, y así puedan adorarle como Él espera que le adoremos, en espíritu y en verdad.
Espero que haya sido de utilidad este artículo, si fue así no olvides compartirlo con alguien a quien también le pueda servir.
Amigos me despido, que estén muy bien. ¡Hasta la próxima!