Siempre tenemos que ser humildes sobre todo, para que Dios pueda hacer un cambio en nosotros, tenemos que humillarnos delante de Dios y dejar que nos utilice.
Tal vez queremos un puesto, o un trabajo, o aumento de sueldo, tal vez queremos conseguir algo, o ser el mejor en alguna actividad, y oramos a Dios para que el nos suba de puesto, pero no lo hace, eso es porque Él está tratando con nuestra actitud y nuestra humildad.
Muchas veces nos creemos los mejores en algunas cosas y decimos, soy el mejor, soy experto en esto, cuando en realidad no lo somos, y al exaltarnos somos humillados, pero cuando tenemos una actitud diferente y vemos a los demás mayores que como nos vemos a nosotros mismos, Dios nos exalta y nos pone en alto en medio de todos. Siempre tenemos que ser humildes en toda ocasión, y saber que sin Dios no somos nada y que todo lo que hemos logrado en la vida a sido porque Él lo a permitido.
Para qué Dios nos use de una manera grande y para que nos ponga en alto, tenemos que humillarnos delante de Él y buscarlo en lo secreto. Así qué recuerden que siempre debemos de ser humildes en todo!!