Les quiero compartir la historia de una niña que desde pequeña, estudiaba en una escuela privada cristiana, y cuando paso a preparatoria, sus papás, la inscribieron a una escuela pública. Ella estaba muy incomoda en esa escuela, porque nunca había convivido con gente de otras creencias y le dijo a sus papás que la volvieran a cambiar de escuela, y ellos le dijeron que la iban a cambiar, pero luego pensó: ¿Que es lo que Dios quiere que haga? ¿Debo estar cómoda o salvar vidas para Cristo? y supo que Dios quería que ella estuviera en esa escuela para que la gente conociera de Jesús. Se quedo en la escuela pública y gano muchas almas para el Señor.
Nosotros la mayoría del tiempo hemos escogido la comodidad por encima de Dios y ha habido veces en las que El nos a dicho que le hablemos a alguien acerca de El, y nosotros, por no salir de nuestra comodidad no lo hemos hecho.
Dios nos ha llamado a esforzarnos y ser valientes, y a compartirle a la gente de Jesús y eso es lo que tenemos que hacer, el problema es que queremos estar cómodos siempre, y cuando Dios nos saca de nuestra comodidad para que hagamos lo que El nos ha mandado a hacer, nosotros nos enojamos y no queremos hacerlo.
Tenemos que despertar, tenemos que levantarnos y seguir a Jesús, El dejo su comodidad y vino a la tierra para morir por nosotros y para que nosotros pudiéramos ser salvos “Juan 3:16″
Sí Jesús no hubiera dejado su comodidad por nosotros, no seríamos salvos.
Sigamos a Jesús, compartamos a la gente de El, no dejemos de buscarlo y seamos perseverantes. Si queremos un avivamiento debemos poner nuestra comodidad a un lado, ponernos en la brecha por nuestro país y humillarnos delante de Dios.
Así qué yo te pregunto: ¿Dejarás tu comodidad para seguir a Jesús? No puedo decirte que es fácil pero todo lo puedes en Cristo que te fortalece.
