Según un análisis, la tecnología ha generado que el ritmo de vida sea más acelerado, y genere problemas como frustración y cansancio cuando algún proceso se tarda más de lo que debería.
No obstante, la Especialista Paola González manifiesta que existen algunas claves que pueden ayudar a desintoxicarte de la tecnología, así como para utilizarla sin que dañe tu salud:
- Entiende los espacios ideales para usarla. Puede ser en la oficina o en la escuela, es decir, en los lugares donde es necesaria para realizar tus tareas.
- Evita el phubbing. Esta práctica te aísla de los demás, así que olvídate de ella en las fiestas, reuniones sociales o al platicar con alguien, para retomar el contacto humano.
- Organiza unas vacaciones libres de tecnología. Existen hoteles que te invitan a dejar a un lado la tecnología, para que disfrutes de tu compañía y de todo lo que se encuentra a tu alrededor. Esto te ayudará a relajarte, descansar y pensar sin estar atado a la tecnología.
- Concéntrate en lo que estás haciendo. Entender que cuando se invaden otros espacios puede ser perjudicial. Por ejemplo, cuando se utiliza en exceso la tecnología en la cama, el cerebro no se relaja y ocasiona insomnio.
- Fomenta actividades donde no se ocupe la tecnología. Haz ejercicio al aire libre, juega con tus hijos o simplemente da una caminata en tu cuadra, salir a pasear, pero sin que tengas a la mano nada que te recuerde la tecnología.
- Crea rutinas. Define los momentos específicos en que utilizarás la tecnología, por ejemplo, por las mañanas revisa tus redes sociales y después olvídate de éstas o checa tu correo en un determinado horario.
“Es importante hacer énfasis en que hay un momento y lugar para todo; trata de contactar con lo que nos rodea sin afectar otras situaciones, es decir, utilizar la tecnología cuando sea necesario y dejarla para disfrutar de nuestro entorno”, concluye Paola González.
Fuente: DI