¿Por qué son importantes las transiciones en la alabanza y adoración?

En Tecnoiglesia hablamos acerca de tecnología, tips musicales, acerca de adoración, pero un aspecto a menudo descuidado (pero no menos importante) es el cómo utilizar las transiciones.

En este post quiero darte una guía de cómo utilizar transiciones en tu tiempo de alabanza y adoración cada semana. Las transiciones son tan importantes como las mismas canciones.

¿Por qué son importantes las transiciones en la alabanza y adoración?

Como líderes de alabanza y músicos debemos lograr que la gente se conecte con Dios el domingo por la mañana. Nada es más importante que el pueblo de Dios conectándose con la presencia de Dios. No queremos que tengan una experiencia musical o solamente cantar con la banda. Queremos corazones conectados con su creador.

En el pasado, he cometido muchos errores en las transiciones. Silencios involuntarios, tropiezos con la secuencia, hasta en una ocasión se me cayó el micrófono.

Con eso dicho, sabemos que ese tipo de cosas sucederán. Pero hagamos nuestro mejor esfuerzo para pensar en todo el tiempo que tenemos asignado para la adoración como si estuviéramos contando una historia o haciendo el soundtrack de una película. Planifica correctamente. Y se intencional en la toma de decisiones.

Algunas ideas para las transiciones

1. Identificar y planificar cada transición – Si haces un set de 3 canciones entonces tienes cuatro transiciones para planear y ensayar. ¿Cómo vas a entrar en la canción uno? ¿Cómo va a pasar de uno a dos? ¿Dos a tres? ¿Cómo saldrás de la tercera canción? Estos momentos de transición no son sólo una oportunidad para que tu y tu equipo de alabanza suenen bien. Puede que una transición rápida e inmediata entre canción y canción sea la solución para las canciones rápidas. Tal vez decir algo muy rápido y muy corto que tenga que ver con la siguiente canción puede ser buena idea.

2. Ensayar cada transición – El ensayo no solo debe tratarse de repasar las canciones. Se trata de construir una historia. Y cada una de las transiciones forma parte de contar esa historia. Asegúrate de que todo el equipo conozca cada transición. ¿Quién empezará la siguiente canción? ¿Cuánto tiempo deben esperar para comenzar?

Otro punto importante. DIRECTORES DE ALABANZA: Piensen bien lo que van a decir, hagan  un pequeño guión de lo que dirán, no lo dejes al azar. A menos que sientas algo espontáneo y de Dios, podrás “improvisar en esto” pero siempre tratar de mantener un orden.

Otros puntos importantes son:

– ¿Cómo puedo apoyar una canción dandole contexto a través de la Palabra de Dios?

– ¿Cómo puedo animar a la gente a cantar más?

– ¿Hay una lectura de la palabra que fortalezca este momento?

3. Realiza variaciones en tus transiciones  – no siempre las transiciones deben ser iguales. Incluso con un set, es útil variar la forma en que tus canciones se mezclan. Aqui hay algunas ideas:

– Invita a participar – A veces el invitar a la iglesia a participar mas en la adoración ayudará a romper el hielo. Puedes invitarlos a saludarse o aun a cantar una canción que invite salir de sus lugares para conocer a otros. Esto ayudará a que el ambiente sea idóneo para el tiempo de alabanza y adoración.

– Repetir un coro – En lugar de terminar una canción, una gran manera de hacer una transición es cantar el coro de nuevo, pero con nada más que el piano o una guitarra acústica. Permite que la voz de la congregación a mayor volumen llene el auditorio o la iglesia. Una vez más, estos momentos harán que todo se sienta menos producido y más espontáneo.

– Canta un Medley de un himno – Los himnos son canciones de transición increíbles porque tienden a conectar a las personas y a unificar más generaciones. A veces estos momentos de transición con un himno generan más ímpetu que una canción completa.

– Silencio intencional – No tengas miedo de llevar a la gente al silencio y al espacio. Las transiciones no siempre tienen que ser el llenar un silencio. El silencio es sólo incómodo cuando no está bien guiado o pastoreado. Pero cuando se hace bien, puede ser una práctica muy saludable para tu iglesia.

– Crea un video de transición – Tal vez con texto animado, o alguna historia con música que pueda ayudarte a pasar a la siguiente canción. Estos videos puedes crearlos desde cero o utilizar material descargado de internet.

– Mezcla en tiempo real – Una transición que hacemos cada semana en la iglesia entre canción y canción es cuando al finalizar la canción 1 ya sea con pads o pianos cambiamos progresivamente la nota y sobre imponemos los sonidos para crear una atmósfera que ayude a cambiar a la canción 2.

Recuerda, el objetivo de nuestras transiciones, ensayos y planificación es conectar los corazones con Dios. Queremos crear una atmósfera que ayude a las personas a ver a Jesús con más claridad.

¿Cuales otros tips de transiciones puedes compartirnos? Deja tu comentario.