Consientes de la importancia de la música en nuestras iglesias, y de cómo la tecnología se a integrado tanto y literalmente nos ha hecho la vida mas fácil, recordé algo que un maestro me decía: “Lo más importante no son las flechas ni el arco, es el indio…” no se si era una alusión a mi persona o una parábola moderna, pero bueno, lo que me queda es pensar en no dejar que la modernidad nos supla, sino que nos mejore.
Así que me permito, esperando que les pueda servir, hacer mi primer aporte con una serie de tutoriales sobre armonía e improvisación musical.
Lo primero quizá sea la pregunta ¿porqué improvisar?
Bueno, resulta que la música dentro de la iglesia lleva el propósito principal de adorar, lo cual supone una manifestación libre del sentir del hombre hacia Dios, lo que no es diferente en el caso de los instrumentistas. No siempre vas a improvisar, pero seguramente habrá pequeños momentos adecuados y necesarios en los cuales debas hacerlo, y recuerda que ahí no va importar la marca de tu teclado o los efectos de tu pedalera, sino el sentir de tu corazón correctamente interpretado por tu conocimiento y la agilidad de tus dedos.
Principios:
1. La música occidental (que es lo que se toca en nuestras iglesias) en su gran mayoría es “Diatónica”, es decir, está ubicada en una tonalidad específica que funciona como un centro, al cual llamaremos Centro Tonal, Tónica o Raíz. Esta tónica se relaciona con las demás notas de manera específica formando un “familia” que se llama Escala, por ejemplo, el Do, re, mi, fa, sol, las y si que todos conocemos, se llama escala de Do mayor, donde Do es el centro tonal y mantiene una relación específica con las demás notas.
2. Para improvisar es muy importante saber la tonalidad en la que estamos (el clásico “en que tono está la rola…”) y en base a ese centro tonal nos podemos mover con cierta libertad en las notas que son parte de esta familia, por ejemplo, si estamos en el tono de G (Sol mayor) donde las notas de esta escala son sol, la, si, do, re, mi y fa# (ojo, no estoy hablando de acordes, sino de simples notas, al referirme a acordes o tonos utilizaré el comúnmente llamado cifrado donde Do es C, Re es D, etc.) puedo moverme con cierta libertad por estas notas, pero otras notas como Fa natural o Sib, etc. no las debo usar, es decir, voy a evitar todas las notas que estén fuera de esa familia.
3. La manera más fácil de improvisar es recurriendo a la Escala Pentatónica, en este caso, mayor. Donde voy a quitar la cuarta y séptima nota, para poder tener una improvisación mucho más libre, por ejemplo: Si estoy en el tono de C las notas de la escala mayor son Do, re, mi, fa, sol, la y si; sin embargo la escala pentatónica será Do, re, mi, sol y la; como pueden ver suprimí fa y si que son el cuarto y séptimo lugar o grados. Con este tipo de escalas la improvisación va a ser mucho más libre y rica, y con un menor riesgo de sonar fuera de lugar.
4. Todo lo anterior es posible siempre y cuando la armonía de la rola se ajuste a los tonos de la escala, si hay un tono que no forma parte de esa familia simplemente hay que analizar esa parte y tocar lo que corresponda.
Espero sus comentarios y que les sea de ayuda, y vamos a seguir con estos temas, para los usuarios de aplicaciones para iPads, iPhones y sistemas Andriod; les recomiendo 2 aplicaciones buenísimas para saber todo tipo de escalas, una es Chord/Scales Compendium de Jazz Apps Mobile LLC y la otra es Scales Lexicon, pero recuerden, lo importante no son las flechas ni el arco sino el Indio. Así que a estudiar…